Gran Hong Kong, décadas de cocina asiática de calidad
Un amigo mío me definió este restaurante, el Gran Hong Kong, como el chino del barrio de toda la vida que nunca le había fallado. Y eso no es decir poco. Porque que un local primero lleve más de 20 años en marcha, y segundo mantenga el nivel, es raro de ver. Este chino de barrio (sin tono peyorativo) ha seguido la evolución de muchos de sus compatriotas y ahora es más un restaurante asiático que puramente chino. Pero siguen siendo referentes en su zona, la de Arturo Soria con López de Hoyos (mira cómo se llega en transporte público). Porque siguen siendo un lugar donde te sientes a gusto comiendo rico.

Y son referentes porque no fallan. Tienen una carta generosa, porque van de lo chino (el pato laqueado) a lo japonés (buen sushi, no espectacular, pero sí bueno), pasando por lo tailandés (como el Pad Thai). Hay de todo para elegir, y todo está muy bueno. Además, tienen varios menús diarios para elegir. Desde el normal (11 euros), al japonés (16 euros), pasando por el asiático (12 euros). Todos con sus tres platos, porque el acompañamiento se puede considerar un plato más, por la cantidad. Más su bebida y su postre. Hemos probado el sushi, los dim sum, los langostinos al curry rojo o las lonchas de pato cantonés. Nada nos ha decepcionado. Todo lo contrario.

El trato es muy atento. La larga tradición del Gran Hong Kong hace que no exista ningún problema de comunicación con el personal. Son alegres e, incluso, bromistas con los habituales. Son rápidos atendiendo pero, como muchos restaurantes asiáticos, a veces rozan el agobio. Como podéis ver, el local es acogedor y está decorado a lo asiático tradicional. Con sus budas, sus lamparas de farolillos y demás. No muy luminoso, eso sí. Es muy buena opción si vivís o trabajáis por la zona. Sin menoscabo de ir aposta a disfrutar con la comida china.