El perfecto Café del Jardín del Museo del Romanticismo

17 de abril de 2019 ·

Café del Jardín del Museo del Romanticismo ha cerrado permanentemente 😭

Parecería que éste es uno de esos pequeños rincones secretos que todo el mundo conoce ya porque ha hablado todo el mundo. Todos los blogs, todas las guías turísticas, todas las revistas. Pero todavía mucha gente ni siquiera llega a atisbar que este tesoro secreto existe. A pocos metros del ajetreo del Metro Tribunal. El Café del Jardín del Museo del Romanticismo es uno de esos sitios de los que todos hablamos, pero a los que no queremos que vaya la gente para egoístamente conservarlos para nosotros.

Café del Jardín del Museo del Romanticismo

En el Museo del Romanticismo (Calle San Mateo 13) puedes disfrutar de una de las colecciones más interesantes de la ciudad. Un viaje en el tiempo a los años románticos. Allí también tenemos un pequeño salón de té perfecto para una merienda lejos del bullicio. El Café del Jardín del Museo del Romanticismo es un viaje al siglo XIX. Un espacio que se sumerge en la época romántica que invadió toda Europa. Hoy, paradójicamente, sigue siendo un lugar muy romántico, aunque con la acepción más moderna de la palabra.

Café del Jardín del Museo del Romanticismo

Este salón de té se ha catapultado a uno de los rincones con mayor encanto de Madrid, sobre todo para los lugareños. Entrando por la puerta principal del Museo se llega a un salón de blancas paredes, amplias ventanas y tonos pastel por todo lugar. Con unos toques vintage muy cuidados y bien buscados en este caso.

Pero lo que lo hace aún más especial es el jardín de su nombre. Un pequeño rincón verde en el que los días cálidos madrileños pasan de una manera especial. Bancos de madera, plantas y maceteros por doquier, una fuente central de época. Y unas pocas mesas ideales para parejas o grupos muy pequeños. Un jardín en el que, además, desaparece el ruido de la ciudad. Perfecto.

Café del Jardín del Museo del Romanticismo

¿Y qué tomar en el Café del Jardín del Museo del Romanticismo?

Sentarse a la mesa en torno a un café o un té es una elección que no falla. Y para acompañarlo lo mejor es un pedazo de alguna de sus tartas caseras, que son de un tamaño generoso. Las estrellas son la red velvet y, sobre todo, la de zanahoria. Pero también las hay de chocolate. Y hay pasteles, cupcakes, donuts, cookies y más dulces opciones. Pero no todo son meriendas o desayunos dulces. Lo salado también tiene su rincón con ensaladas, quiches, empanada, tostas de pan payés o bocadillos. El Café del Jardín despunta en las meriendas, pero es perfecto para cualquier hora.

Su horario es el mismo que el del museo. De noviembre a abril de martes a sábados 9.30 a 18.30 horas, y de mayo a octubre, de martes a sábados de 9.30 a 20.30 horas. Y todos los domingos del año de 10 a 15 horas. Los lunes siempre descansa. Para entrar a visitarlo o a tomar algo no hace falta comprar la entrada para el museo. Y podéis aprovechar también pasa visitar su tienda-librería.